La definición de prototipo proviene del griego πρωτότυπος prōtótypos: Del prefijo “Protos”, que puede traducirse como “primero” y del sufijo “tipos”, que significa “modelo”. En la creación y desarrollo de productos digitales, un prototipo es una representación de media-alta fidelidad que incluye la interacción de la interfaz para hacer pruebas de experiencia de usuario.
Basado en mi experiencia trabajando junto al equipo de Darien Technology en el Laboratorio de Innovación y el Laboratorio Digital, les puedo afirmar que en el desarrollo de productos digitales los prototipos son una pieza clave que nos permiten pasar de una idea a crear un Producto Mínimo Viable. A través de las metodologías de Design Thinking y Visual Thinking conectamos las necesidades de las personas, convertimos las ideas en imágenes desde un garabato en un Post-it hasta un prototipo de alta fidelidad para resolver problemas y propiciar la innovación.
El proceso de Design Thinking comprende 5 fases fundamentales: Empatizar, Definir, idear, hacer prototipos y probar. Estas fases no son lineales, al contrario debemos iterar a lo largo de nuestro proceso para encontrar soluciones innovadoras centradas en las necesidades de las personas, pero pocas empresas o startups llegan a la fase de generar prototipos y probarlos.
En lugar de suponer y arriesgarnos a desarrollar un producto que no tenga éxito, debemos minimizar riesgos y garantizar una propuesta de valor que cumpla con las necesidades de los usuarios mediante un primer modelo de estudio tangible. Cabe destacar que el Pensamiento Visual está presente durante el proceso de Design Thinking.
Existen diferentes métodos desde wireframes de baja fidelidad para definir el concepto, la estructura y los componentes básicos, las maquetas (mockups) estáticas de media-alta fidelidad para definir el diseño visual (color, tipografía, sombras…) y los prototipos de media-alta fidelidad que simulan la interacción de la interfaz para las pruebas de experiencia de usuario. Estas herramientas se van aplicando en todo el proceso de innovación para ayudarnos a visualizar conceptos, probar hipótesis y validar.
Las dos ventajas principales para invertir en un prototipo son:
Lograr que los stakeholders entiendan cómo funciona el producto para facilitar la co-creación.
Poder validar la hipótesis inicial, corroborar funcionalidades, hacer investigaciones centradas en el usuario (UX/UI), analizar, identificar problemas, desechar ideas rápidamente y aportar nuevas soluciones para dar paso a un desarrollo iterativo e incremental en poco tiempo.
Para nosotros la creación de prototipos es tan importante que hemos creado un Laboratorio Digital UI/UX llamado Cafetín Digital que experimenta con prototipos y busca feedbacks con usuarios reales, antes de avanzar, para ir modificando los procesos en función de los resultados. En este Lab damos servicios de investigación, de diseño de wireframes, maquetas, prototipos y sistemas de diseño UI.
Como vemos, un prototipo es una herramienta de estudio clave que nos permite validar una hipótesis de forma ágil materializando el primer entregable. Aprender rápido a un costo más eficiente.
Si queremos innovar debemos incluirlos en nuestro proceso desde la etapa inicial hasta la etapa final para aterrizar nuestras ideas y generar valor.